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Cuando se aproximaba la Pascua de los judíos, subió Jesús a Jerusalén. Y en el *templo halló a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, e instalados en sus mesas a los que cambiaban dinero… Entonces, haciendo un látigo de cuerdas, echó a todos del templo,… juntamente con sus ovejas y sus bueyes;… regó por el suelo las monedas de los que cambiaban dinero y derribó sus mesas…. A los que vendían las palomas les dijo: —¡Saquen esto de aquí! ¿Cómo se atreven a convertir la casa de mi Padre en un mercado?…. Sus discípulos se acordaron de que está escrito: «El celo por tu casa me consumirá.» Juan 2:13-24 NVI
Esta palabra, me hace pensar en cuantas palomas, ovejas, bueyes y mesas de cambio se ponen de por medio entre la casa del padre y nosotros,… en cada actividad, en cada programa, en cada oportunidad para conversar sobre su palabra y su amor,…Si,… desafortunadamente sigue siendo así,… en muchas ocasiones un mercado que no deja entrever que el celo por nuestra casa nos consuma, pues su casa es la nuestra, su corazón nuestro corazón y su amor el nuestro…
Cada día, el Maestro nos observa,… nos descifra,… y en su gran humildad no necesita que nadie le informe nada acerca de los demás, pues él conoce el interior del *ser humano. Juan 2:25 NVI,… nuestras motivaciones, nuestra intensión, nuestro proceder,…Mmmmm,… no se como seguirá manifestando el celo por la casa del padre,… quizás se pone triste al ver que no comprendemos aun su palabra sencilla y amable,… sus instrucciones precisas desprovistas de necesidad, mas que de su palabra y de un descanso pleno en El,….
Necesitamos más celo por su casa,… por una vida práctica de su palabra,… por una confianza absoluta en el que todo lo sabe, todo lo puede, todo perdona, todo lo espera y todo lo ha dado por nosotros.
Devocional. Tu Tiempo con el Número Uno. Celo por tu Casa…. 11 Marzo
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Cuando se aproximaba la Pascua de los judíos, subió Jesús a Jerusalén. Y en el *templo halló a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, e instalados en sus mesas a los que cambiaban dinero… Entonces, haciendo un látigo de cuerdas, echó a todos del templo,… juntamente con sus ovejas y sus bueyes;… regó por el suelo las monedas de los que cambiaban dinero y derribó sus mesas…. A los que vendían las palomas les dijo: —¡Saquen esto de aquí! ¿Cómo se atreven a convertir la casa de mi Padre en un mercado?…. Sus discípulos se acordaron de que está escrito: «El celo por tu casa me consumirá.» Juan 2:13-24 NVI
Esta palabra, me hace pensar en cuantas palomas, ovejas, bueyes y mesas de cambio se ponen de por medio entre la casa del padre y nosotros,… en cada actividad, en cada programa, en cada oportunidad para conversar sobre su palabra y su amor,…Si,… desafortunadamente sigue siendo así,… en muchas ocasiones un mercado que no deja entrever que el celo por nuestra casa nos consuma, pues su casa es la nuestra, su corazón nuestro corazón y su amor el nuestro…
Cada día, el Maestro nos observa,… nos descifra,… y en su gran humildad no necesita que nadie le informe nada acerca de los demás, pues él conoce el interior del *ser humano. Juan 2:25 NVI,… nuestras motivaciones, nuestra intensión, nuestro proceder,…Mmmmm,… no se como seguirá manifestando el celo por la casa del padre,… quizás se pone triste al ver que no comprendemos aun su palabra sencilla y amable,… sus instrucciones precisas desprovistas de necesidad, mas que de su palabra y de un descanso pleno en El,….
Necesitamos más celo por su casa,… por una vida práctica de su palabra,… por una confianza absoluta en el que todo lo sabe, todo lo puede, todo perdona, todo lo espera y todo lo ha dado por nosotros.
MIguel Montes