Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 10 de noviembre. Engañados.

Romanos 6:23 NTV: Pues la paga que deja el pecado es la muerte, pero el regalo que Dios da es la vida eterna por medio de Cristo Jesús nuestro Señor.

Si estudiamos con detenimiento las armas de Satanás para apartarnos de Dios y su voluntad, encontramos que en medio de sus astucias va a tratar de convencernos de la nimiedad de lo que hacemos y con ello va a lograr que abramos una rendija en la puerta, que sería más que suficiente para que entre y haga de las suyas y termine, como lo dice la Biblia, matando, dividiendo y destruyéndonos.

El diablo va a tratar de engañarnos con la cuestión del tiempo y nos va a susurrar al oído: «Tranquilo, ya es muy tarde, no pidas perdón» o «No lo hagas» o «De repente» nos va a susurrar al oído: «Achhh, es demasiado pronto, no lo hagas». Y esta pequeña insinuación nos lleva a pensar que lo que hacemos es demasiado pequeño para Dios.

Así mismo, el diablo nos puede engañar con medidas falsas y nos puede llevar por una corriente aparentemente suave y sin muchos contratiempos, cuando en realidad lo que ha preparado para nosotros es una caída libre al abismo, de la misma manera como una catarata cae a lo profundo.

Engaños sutiles y seducciones casi disfrazadas de algo bueno, cuando en realidad están llenas de maldad, es lo que fabrica a diario Satanás en las vidas de muchas personas. Algunas de estas sutilezas son: «Escribe un mensajito, no pasa nada», «Tranquilo, date ese pequeño permiso que nadie se va a dar cuenta», «Ashh, no seas tan legalista ni tan santico», «Ayyy, déjate ver y muestra más», «Dale clic, es solo una piltrafa, una trampita, una mentirita, tranquilo». Y de esta manera, cuántas cosas más vienen como pequeñas insinuaciones a destruir hogares, vidas, profesiones, trabajos y cuántas cosas más que Dios nos ha dado para nuestro beneficio.

(Gálatas 6:7 NTV) No se dejen engañar: nadie puede burlarse de la justicia de Dios. Siempre se cosecha lo que se siembra.

Vamos a orar.

Ayúdame Señor a estar vigilante y despierto ante las provocaciones e insinuaciones del diablo en mi vida. Tuyo soy Señor y hoy decido someterme a ti y resistir al diablo para que huya de mí y yo pueda hacer nada más que tu voluntad Señor. En el nombre de Jesús, amén.

Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 9 de noviembre. Necesitas deseos de aprender.
Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 11 de noviembre. No creen porque no son mis ovejas.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *