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Salmos 37:8 NTV
¡Ya no sigas enojado! ¡Deja a un lado tu ira! No pierdas los estribos, que eso únicamente causa daño.
Yo no se cuantas veces habré estado enojado y llenándome cada día que pasaba de motivos y motivos para envenenar mas la existencia, pues eso es lo único que consigues cuando le das rienda suelta al enojo.
el libro de Santiago 1:20 NTV dice: «El enojo humano no produce la rectitud que Dios desea.» y la verdad, la ira solo produce acciones crueles y malvadas en todos nosotros.
El salmo prácticamente entona un ruego, revestido de una orden y dice «¡Ya no sigas enojado! ¡Deja a un lado tu ira!» y sea cual sea el motivo de tu enojo, Dios no quiere que andes enojado por a, por b por c ni mucho menos pensando que estas actuando justamente cuando lo haces, pues todas las situaciones de la vida que requieran justicia, debemos dejárselas a Dios.
Finalmente, en el verso, Dios nos advierte como siempre de su cuidado supremo sobre nuestras vidas y por eso nos dice. «No pierdas los estribos, que eso únicamente causa daño. y la verdad el enojo, y la ira, solo nos va a dejar marcas en la frente del ceño fruncido, que finalmente son las marcas de nuestra imposibilidad para pasar por alto la ofensa y para perdonar; como te digo, Dios nunca se queda con nada y siempre hace su perfecta voluntad, contigo y conmigo, con tus deudas y las mías y con los tiempos que destina para que se salden por completo.
vamos a orar
Gracias Señor por reconciliarme conmigo mismo y con las personas que me han hecho sentir tanta frustración y enojo. hoy decido esperar en ti y confiar en que tu estas obrando tu perfecta voluntad y que no se trata de mi sino de ti, lléname señor y llévate toda mi amargura y resentimiento, no me dejes caer en tentación ni mucho menos señalar ni juzgar lo que con mis ojos no alcanzo a ver ni con mi corazón logro procesar. te necesito Señor, fuerza mía y tesoro mío, pues solo tu puedes pagar todas mis deudas y la de quienes tanto amo, en el nombre de Jesús, amen.
Tu Tiempo con el Número Uno. 4a Temporada, 31 Octubre, Ya no más.
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Salmos 37:8 NTV
¡Ya no sigas enojado! ¡Deja a un lado tu ira! No pierdas los estribos, que eso únicamente causa daño.
Yo no se cuantas veces habré estado enojado y llenándome cada día que pasaba de motivos y motivos para envenenar mas la existencia, pues eso es lo único que consigues cuando le das rienda suelta al enojo.
el libro de Santiago 1:20 NTV dice: «El enojo humano no produce la rectitud que Dios desea.» y la verdad, la ira solo produce acciones crueles y malvadas en todos nosotros.
El salmo prácticamente entona un ruego, revestido de una orden y dice «¡Ya no sigas enojado! ¡Deja a un lado tu ira!» y sea cual sea el motivo de tu enojo, Dios no quiere que andes enojado por a, por b por c ni mucho menos pensando que estas actuando justamente cuando lo haces, pues todas las situaciones de la vida que requieran justicia, debemos dejárselas a Dios.
Finalmente, en el verso, Dios nos advierte como siempre de su cuidado supremo sobre nuestras vidas y por eso nos dice. «No pierdas los estribos, que eso únicamente causa daño. y la verdad el enojo, y la ira, solo nos va a dejar marcas en la frente del ceño fruncido, que finalmente son las marcas de nuestra imposibilidad para pasar por alto la ofensa y para perdonar; como te digo, Dios nunca se queda con nada y siempre hace su perfecta voluntad, contigo y conmigo, con tus deudas y las mías y con los tiempos que destina para que se salden por completo.
vamos a orar
Gracias Señor por reconciliarme conmigo mismo y con las personas que me han hecho sentir tanta frustración y enojo. hoy decido esperar en ti y confiar en que tu estas obrando tu perfecta voluntad y que no se trata de mi sino de ti, lléname señor y llévate toda mi amargura y resentimiento, no me dejes caer en tentación ni mucho menos señalar ni juzgar lo que con mis ojos no alcanzo a ver ni con mi corazón logro procesar. te necesito Señor, fuerza mía y tesoro mío, pues solo tu puedes pagar todas mis deudas y la de quienes tanto amo, en el nombre de Jesús, amen.
MIguel Montes