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Ezequiel 16:44 NVI
»”Los que acostumbran citar refranes dirán esto de ti: ‘De tal palo, tal astilla’.
En este pasaje Ezequiel, viene hablando de la infidelidad de Jerusalén, y como en un espejo, no hace mas que demostrar con hechos, las perversiones del pueblo de Jerusalén y en este relato, creo yo que de manera pormenorizada hacer visible en el espejo de Dios aquellas cosas que se nos olvidan hemos vivido y que aun seguimos viviendo.
Habla el verso de Ezequiel de todas las depravaciones que al interior de nuestras vidas pueden haber, tales como la inmoralidad sexual, las borracheras, orgias, perversiones que han habido en nuestras vidas entre los hermanos, familiares, padres, hijos,…algunos de ellos camuflados en la espesura del no se puede saber, ni decir, ni mucho menos nombrar, porque la vergüenza nos aniquilaría…
Prácticas repugnantes como lo dice la palabra, que a la larga terminan haciendo de nuestra vidas, pequeños infiernos, lugares invivibles, y en algunos casos, huidas, con tal de no permanecer ahí donde nos hacen tanto daño.
Rezagos y huellas que dejan al interior de las familias, la costumbre del alcohol, del cigarrillo, las drogas, los gritos, los divorcios, o lo insuficientes que somos los unos para los otros, cuando en medio de todo el pecado se anida y no deja ver mas allá el plan de Dios para nuestras vidas.
Y parece que odiamos todas esas cosas de nuestra familia que no queremos recordar ni mencionar, pero al final, nos damos cuenta como lo cita Ezequiel, que seguimos haciendo lo mismo y repitiendo los patrones que tanto nos causaron dolor.. (Ezequiel 16:44 NVI) por eso »”Los que acostumbran citar refranes dirán esto de ti: ‘De tal palo, tal astilla’.
Vamos a orar…
Perdón Señor porque después de quejarme tanto y de no querer repetir patrones de vida que me hicieron tanto daño, terminé haciendo lo mismo y sigo haciéndolo…..hoy reconozco que todo esto me aparta de ti y divide y daña mi hogar…perdóname Señor y ayúdame a salir de una vez por todas del pantano espiritual en el que me encuentro, y todo esto te lo pido, en el nombre de Jesús. amen.
Tu Tiempo con el Número Uno. 4a Temporada. 9 Junio. En el espejo de Dios, todo se ve.
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Ezequiel 16:44 NVI
»”Los que acostumbran citar refranes dirán esto de ti: ‘De tal palo, tal astilla’.
En este pasaje Ezequiel, viene hablando de la infidelidad de Jerusalén, y como en un espejo, no hace mas que demostrar con hechos, las perversiones del pueblo de Jerusalén y en este relato, creo yo que de manera pormenorizada hacer visible en el espejo de Dios aquellas cosas que se nos olvidan hemos vivido y que aun seguimos viviendo.
Habla el verso de Ezequiel de todas las depravaciones que al interior de nuestras vidas pueden haber, tales como la inmoralidad sexual, las borracheras, orgias, perversiones que han habido en nuestras vidas entre los hermanos, familiares, padres, hijos,…algunos de ellos camuflados en la espesura del no se puede saber, ni decir, ni mucho menos nombrar, porque la vergüenza nos aniquilaría…
Prácticas repugnantes como lo dice la palabra, que a la larga terminan haciendo de nuestra vidas, pequeños infiernos, lugares invivibles, y en algunos casos, huidas, con tal de no permanecer ahí donde nos hacen tanto daño.
Rezagos y huellas que dejan al interior de las familias, la costumbre del alcohol, del cigarrillo, las drogas, los gritos, los divorcios, o lo insuficientes que somos los unos para los otros, cuando en medio de todo el pecado se anida y no deja ver mas allá el plan de Dios para nuestras vidas.
Y parece que odiamos todas esas cosas de nuestra familia que no queremos recordar ni mencionar, pero al final, nos damos cuenta como lo cita Ezequiel, que seguimos haciendo lo mismo y repitiendo los patrones que tanto nos causaron dolor.. (Ezequiel 16:44 NVI) por eso »”Los que acostumbran citar refranes dirán esto de ti: ‘De tal palo, tal astilla’.
Vamos a orar…
Perdón Señor porque después de quejarme tanto y de no querer repetir patrones de vida que me hicieron tanto daño, terminé haciendo lo mismo y sigo haciéndolo…..hoy reconozco que todo esto me aparta de ti y divide y daña mi hogar…perdóname Señor y ayúdame a salir de una vez por todas del pantano espiritual en el que me encuentro, y todo esto te lo pido, en el nombre de Jesús. amen.
MIguel Montes