Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: Apple Podcasts | Spotify | Correo electrónico | YouTube Music |
Isaías 12:2 NTV. Miren, Dios ha venido a salvarme. Confiaré en él y no tendré temor. El SEÑOR DIOS es mi fuerza y mi canción; él me ha dado la victoria.
Cuando nos preguntamos de qué podría salvarnos el Señor, las respuestas pueden ser muchas. De la frustración, del abuso, de la mentira, del engaño, de la muerte, de la enfermedad, de la locura, del orgullo, del caos, de una quiebra, de un divorcio, de una mala decisión y de cuantas cosas usted pueda encontrar motivo para decir: de esto me ha salvado el Señor.
Por eso el verso dice: «Dios ha venido a salvarme. Confiaré en él y no tendré temor» y la verdad es que cuando tenemos esta seguridad, todo temor desaparece, pues podemos descansar tranquilamente en el perfecto amor y cuidado de Dios para con nosotros.
Termina el verso diciendo: «El SEÑOR DIOS es mi fuerza y mi canción; él me ha dado la victoria». Y yo creo que ciertamente cuando nos sentimos sin fuerzas ni aliento, si se lo pedimos, el Señor nos renueva, nos empuja y nos levanta a como dé lugar de la situación en la que estemos. Y así mismo, se vuelve nuestra canción, pues es Él mismo el que nos permite verlo y reconocerlo como Señor de nuestras vidas, por lo que terminamos adorándole y dándole gracias.
Vamos a orar.
Gracias Señor por venir a salvarme, hoy yo confío en ti y te entrego todo lo que tengo y lo que soy. Decido abandonar todo temor y descansar completamente en ti. Tú eres mi fuerza Señor y mi más bella, eterna y constante canción. Gracias Señor por renovar mis fuerzas y llenarme de seguridad, aceptación e importancia. En el nombre de Jesús, amén.
Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 14 de Diciembre. Dios te salva.
Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: Apple Podcasts | Spotify | Correo electrónico | YouTube Music | RSS
Isaías 12:2 NTV. Miren, Dios ha venido a salvarme. Confiaré en él y no tendré temor. El SEÑOR DIOS es mi fuerza y mi canción; él me ha dado la victoria.
Cuando nos preguntamos de qué podría salvarnos el Señor, las respuestas pueden ser muchas. De la frustración, del abuso, de la mentira, del engaño, de la muerte, de la enfermedad, de la locura, del orgullo, del caos, de una quiebra, de un divorcio, de una mala decisión y de cuantas cosas usted pueda encontrar motivo para decir: de esto me ha salvado el Señor.
Por eso el verso dice: «Dios ha venido a salvarme. Confiaré en él y no tendré temor» y la verdad es que cuando tenemos esta seguridad, todo temor desaparece, pues podemos descansar tranquilamente en el perfecto amor y cuidado de Dios para con nosotros.
Termina el verso diciendo: «El SEÑOR DIOS es mi fuerza y mi canción; él me ha dado la victoria». Y yo creo que ciertamente cuando nos sentimos sin fuerzas ni aliento, si se lo pedimos, el Señor nos renueva, nos empuja y nos levanta a como dé lugar de la situación en la que estemos. Y así mismo, se vuelve nuestra canción, pues es Él mismo el que nos permite verlo y reconocerlo como Señor de nuestras vidas, por lo que terminamos adorándole y dándole gracias.
Vamos a orar.
Gracias Señor por venir a salvarme, hoy yo confío en ti y te entrego todo lo que tengo y lo que soy. Decido abandonar todo temor y descansar completamente en ti. Tú eres mi fuerza Señor y mi más bella, eterna y constante canción. Gracias Señor por renovar mis fuerzas y llenarme de seguridad, aceptación e importancia. En el nombre de Jesús, amén.
MIguel Montes