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Eclesiastés 11:4 NTV: «El agricultor que espera el clima perfecto nunca siembra; si contempla cada nube, nunca cosecha».
No sé cuántas oportunidades nos hemos perdido en la vida por esperar las condiciones perfectas. Yo creo, y más bien lo he aprendido del Señor, que el tiempo es hoy y lo que Él mande, lo debemos hacer, así no se vean las condiciones o así pensemos que no es el tiempo. Cuando el Señor dice, lo debemos hacer.
Muchas veces la duda no hará más que rezagarnos y apartarnos de los planes de Dios para nuestras vidas, y creo que esto obedece a que Dios ama que le creamos y que seamos personas de fe, reposadas y tranquilas en Él, sabiendo que podemos descansar en que nosotros hacemos lo que nos corresponde y Dios deliberadamente hará su perfecta voluntad.
Y si esto aplica para las decisiones importantes de la vida cotidiana, en tanto los negocios, las relaciones y todo en general, mucho más aplica para nuestra vida espiritual, pues esperar a que se presenten las condiciones perfectas no nos llevará a nada. Si esperamos por el tiempo y el lugar perfectos para leer la Biblia, nunca la leeremos. Si esperamos encontrar la iglesia perfecta, nunca nos uniremos a una. Si esperamos encontrar el ministerio perfecto, nunca serviremos.
Por eso, hoy mismo puedes dar los pasos necesarios para crecer espiritualmente y no esperar más por las condiciones que posiblemente nunca se darán como tú crees que vendrán.
Vamos a orar.
Gracias, Señor, por tu palabra y tu consejo a tiempo. Hoy decido creer y descansar en la fe que me une a ti y me hace uno contigo. Creo porque mi dicha es creerte y vivir seguro en tu presencia. Decido tomar decisiones hoy y comprometerme con llevarlas a la práctica. En el nombre de Jesús, amén.
Tu Tiempo con el Número Uno. 5ª temporada, 30 de abril. Hazlo ya.
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Eclesiastés 11:4 NTV: «El agricultor que espera el clima perfecto nunca siembra; si contempla cada nube, nunca cosecha».
No sé cuántas oportunidades nos hemos perdido en la vida por esperar las condiciones perfectas. Yo creo, y más bien lo he aprendido del Señor, que el tiempo es hoy y lo que Él mande, lo debemos hacer, así no se vean las condiciones o así pensemos que no es el tiempo. Cuando el Señor dice, lo debemos hacer.
Muchas veces la duda no hará más que rezagarnos y apartarnos de los planes de Dios para nuestras vidas, y creo que esto obedece a que Dios ama que le creamos y que seamos personas de fe, reposadas y tranquilas en Él, sabiendo que podemos descansar en que nosotros hacemos lo que nos corresponde y Dios deliberadamente hará su perfecta voluntad.
Y si esto aplica para las decisiones importantes de la vida cotidiana, en tanto los negocios, las relaciones y todo en general, mucho más aplica para nuestra vida espiritual, pues esperar a que se presenten las condiciones perfectas no nos llevará a nada. Si esperamos por el tiempo y el lugar perfectos para leer la Biblia, nunca la leeremos. Si esperamos encontrar la iglesia perfecta, nunca nos uniremos a una. Si esperamos encontrar el ministerio perfecto, nunca serviremos.
Por eso, hoy mismo puedes dar los pasos necesarios para crecer espiritualmente y no esperar más por las condiciones que posiblemente nunca se darán como tú crees que vendrán.
Vamos a orar.
Gracias, Señor, por tu palabra y tu consejo a tiempo. Hoy decido creer y descansar en la fe que me une a ti y me hace uno contigo. Creo porque mi dicha es creerte y vivir seguro en tu presencia. Decido tomar decisiones hoy y comprometerme con llevarlas a la práctica. En el nombre de Jesús, amén.
MIguel Montes